En un espacio abierto y amplio se colocan todos los jugadores en línea subidos a sus respectivos zancos. El objetivo del juego es intentar llegar a la meta en primer lugar sin caerse de los zancos. Si alguno de los jugadores se cayera, quedará eliminado. Quien llegue primero es el ganador.
La
edad de los jugadores oscila entre 7 a 12 años.